¿Qué es la terapia láser?
La Terapia Láser o fotobiomodulación (PBM) es el uso de determinadas longitudes de onda de luz (rojo e infrarrojo cercano), para producir una reacción fotoquímica y un efecto terapéutico. Los efectos fisiológicos incluyen aceleración en la cicatrización y recuperación de lesiones, reducción del dolor, aumento de la circulación y disminución de la inflamación.
Antiinflamatorio: K-Laser produce un efecto anti-edema: de hecho, promueve la vasodilatación y activa el sistema de drenaje linfático (drenando las áreas edematosas). Así, la hinchazón causada por traumatismos y/o inflamación es reducida.
Analgésico: La terapia K-Laser afecta positivamente a los receptores del dolor: aumenta el umbral del dolor mientras reduce la transmisión de estímulos de dolor en el cerebro. El dolor también se reduce gracias al efecto antiinflamatorio y antiedema. La terapia K-Laser desencadena la producción de endorfinas.
Mejora la actividad vascular: La terapia K-Laser aumenta significativamente la formación de nuevos capilares, acelerando así el proceso de curación de tejidos dañados, curando heridas rápidamente y reduciendo el área dañada Además, los beneficios incluyen aumento de la angiogénesis, que hace que los vasos sanguíneos se dilaten temporalmente. El aumento del flujo de sangre en el área dañada facilita el proceso de curación y reduce el dolor.
Mejora la función nerviosa: La terapia K-Laser se usa para tratar lesiones nerviosas tales como parestesias traumáticas o iatrogénicas, disestesias...
Mejora la actividad metabólica: La terapia K-Laser aumenta la producción de enzimas específicas para el transporte de oxígeno, facilitando así la reparación y la regeneración de células dañadas.
Mejora en heridas y acelera la regeneración de tejidos: La terapia K-Laser permite heridas, úlceras y mucositis curen más rápido gracias a la bioestimulación y regeneración tisular.